Tuvo lugar entre del 7 al 9 de octubre en la ciudad de Bogotá, Colombia, y fue organizado por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) que es la autoridad geográfica y catastral del país, dentro del marco de la Semana Geomática Internacional 2024. El CPCI es una institución que tiene por finalidad divulgar la importancia del Catastro en el desarrollo de los países, establecer un vínculo permanente entre los organismos catastrales de Iberoamérica, y facilitar una red que para el intercambio de información, experiencias y mejores prácticas. En el evento participaron organismos del sector que representaron a 12 países de la región.
La conferencia inaugural titulada “El catastro multipropósito como pilar de la gobernanza territorial: perspectivas globales y el caso de Colombia” estuvo a cargo del director del IGAC, en la que abordó temas asociados con el plan nacional del desarrollo, la cadena de valor de la información geoespacial, la actualización catastral, la sostenibilidad del catastro y la búsqueda de un modelo que coadyuve a esa fundamental tarea, la apropiación del catastro por parte de la sociedad en los procesos de desarrollo, y el plan estratégico de acción decenal y modelo de gestión y operación catastral. Asimismo la presentación se orientó hacia el papel del catastro en la reforma rural integral, con impacto en el mercado inmobiliario y su dinamización, en la seguridad alimentaria con el aprovechamiento de las tierras productivas y en el acceso a la propiedad a través de procesos de formalización y distribución de la tierra.
Presentación institucional del IGAC, G. A. Marulanda. Fuente: http://www.catastrolatino.org/documentos/2024/XV%20Congreso%20Colombia/0_GUSTAVO%20MARULANDA.pdf
El evento tuvo como ejes temáticos al dato catastral y su mantenimiento, y aprovechamiento multipropósito del dato catastral. Para la primera línea temática, se contextualizó en primer lugar la generación del dato tomando como referencia los aspectos sociales, económicos y ambientales contemporáneos, de manera de logar una mejor comprensión de la relevancia de los datos catastrales para una gobernanza responsable del territorio, y la importancia de su integración con otras fuentes, como los datos demográficos, ambientales y socioeconómicos, para que sea posible agregar valor a los mismos para aplicaciones a nivel de planificación del territorio e identificación temprana de riesgos.
Se exploró el uso de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático en la detección de construcciones y cultivos. Asimismo se realizó un repaso a los métodos de captura de datos directos, indirectos y variantes, en que se destacó la importancia de relacionar el método con la finalidad, la zona de trabajo, el costo económico y el tiempo, destacando la importancia de documentar los datos a través de los metadatos, y no perder de vista la importancia del contacto directo con el territorio y la participación y colaboración de los interesados y comunidades en los procesos catastrales. En definitiva, las herramientas para generar el dato deben estar en sintonía o adaptarse al entorno geográfico, social y cultural en que se apliquen.
En cuanto al mantenimiento de los datos catastrales se lo observó como un problema recurrente en los países de la región, que requiere un enfoque más asociativo con los agentes externos al catastro que operan en el territorio y una mayor participación ciudadana, tarea para la cual es necesario un acercamiento de la institución a la comunidad. Dentro de este marco, se consideró la importancia de la colaboración de todos los organismos y profesionales que generan datos con alcance a la actividad catastral, tomando como pilar estrategias de intercambio ganar-ganar en la que las partes involucradas reciben beneficios por partes iguales, derivados fundamentalmente de la actualidad de los datos. Al respecto, se hizo mención a convenios de colaboración con los gobiernos locales, colegios profesionales, administración tributaria y otros ministerios, a efectos de hacer más dinámico y oportuno los procesos de altas, bajas y modificaciones, destacando para tal fin la importancia que adquieren los medios electrónicos y el consecuente aumento en la efectividad y eficiencia, sumando al ahorro de tiempo y desplazamientos.
Respecto al segundo eje temático, el foco estuvo puesto en la utilización de los datos catastrales como fundamento para maximizar su valor para los gobiernos y la sociedad, integrándolos en la gobernanza del territorio en aspectos relacionados con el desarrollo urbano y rural sostenible y como insumo para la gestión de riesgos, monitoreo en los cambios del suelo, impacto ambiental, titulación a las mujeres, cambio climático y tributación inmobiliaria.
La
presentación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y
la Agricultura (FAO), destacó que su quehacer gira en torno a los Objetivos de
Desarrollo Sostenible (ODS) y que el monitoreo de sus indicadores requiere de una
herramienta clave que son los datos catastrales. Para tal fin, deben
desarrollarse enfoques culturales que incorporen además de los derechos
formales, la informalidad y los derechos consuetudinarios y que promuevan
procesos simplificados adaptados a los contextos locales, lo cual incluye la
formalización y el reconocimiento de derechos con enfoque en la prevención de
conflictos y la participación activa de los
beneficiarios en los datos levantados en el territorio, como una manera de
aportar legitimidad y transparencia a los barridos catastrales.
Presentación
institucional de FAO, Amparo Cerrato. Fuente: http://www.catastrolatino.org/documentos/2024/XV%20Congreso%20Colombia/4_CONFERENCIA%20MAGISTRAL%20-%20AMPARO%20CERRATO.pdf
En este bloque ha sido muy interesante observar el modelo de gobernanza integral de la gestión catastral desarrollado por el IGAC, el cual pone especial énfasis en los aspectos sociales que son cruciales para introducir cambios culturales, y que se apoya en los siguientes pilares: municipios con programas de desarrollo con enfoque territorial, reforma rural integral, control de deforestación y fortalecimiento de la gestión ambiental, enfoque de género para eliminar las brechas en la tenencia, y el enfoque intercultural constituido por mecanismos de participación e inclusión en territorios indígenas y colectivos. El despliegue de estas acciones diferenciales tiene apoyo en el fortalecimiento de capacidades en los contextos rurales, en los planes de comunicación para vincular a todas las partes interesadas en los procesos del catastro multipropósito, el programa de diálogo institucional y comunitario, el refuerzo de los métodos participativos de las comunidades en la validación y socialización de la información, y la divulgación de los resultados del proceso de formación y actualización catastral a los actores institucionales y comunitarios. Además el IGAC se ha comprometido a realizar un acompañamiento fiscal a los municipios para mitigar los efectos fiscales de la actualización de valores catastrales siguiendo criterios de eficiencia, justicia, equidad y progresividad, y en cuanto al enfoque de género se ha logado incorporar la variable género en el modelo de datos catastral.
Por otra parte, se analizó la relación del catastro con los temas ambientales en el que la zonificaciones territoriales deben tomar como base la información catastral, a fin de excluir de los procesos de adjudicación de tierras las superficies con destino a protección ambiental. Además en varios procedimientos de control es necesario identificar a los titulares y el alcance de sus derechos en el territorio, para monitorear los cambios en el uso del suelo que sean pasibles de generar un impacto negativo en el ambiente. Ya en un plano más general, la acción tutelar de los Estados respecto al manejo y salvaguarda de los recursos naturales, origina la existencia de derechos a un medio ambiente adecuado que se materializa a través de un conjunto de regulaciones sobre los bienes inmuebles tendiente a la preservación de determinados activos ambientales. Desde el punto de vista económico deben ser analizados nuevos conceptos de valor de las parcelas que tengan en cuenta los servicios ambientales que proveen, hecho que trae aparejado la necesidad de incorporar indicadores que puedan ser llevados a nivel de parcela para cuantificarlos. Con relación a la tributación medioambiental se deben generar mecanismos que incentiven comportamientos que estén alineados con planes de manejo que apunten a la sostenibilidad económica y ambiental de la explotación del suelo y sus recursos por medio de una disminución de la presión fiscal. Además se vieron aplicaciones en las que pueden superponerse espacialmente las parcelas con afectaciones ambientales georreferenciadas provenientes de distintos organismos, a efectos que sean incluidas en actos y contratos relativos al dominio.
Para finalizar, se trató el tema de los instrumentos para capturar el valor de suelo y como el valor catastral afecta a los sistemas impositivos, y la necesidad de adaptar los impuestos de acuerdo al potencial que tienen. Se evaluó el impacto de los instrumentos de financiamiento en el desarrollo urbano como la participación en el incremento del valor del suelo, bonificaciones y compensaciones que resultan de intervenciones realizadas por el Estado, para lo cual es indispensable mantener la actualidad de la base imponible y que los catastros tengan una vinculación continua con el planeamiento y con la economía política que gira en torno al tema de la tributación inmobiliaria, de manera que ésta incorpore mecanismos de incentivos. En definitiva, atender el hecho que el catastro se volverá multipropósito en la medida que los datos que genera se utilicen para el ordenamiento del territorio, y a través de este al desarrollo de instrumentos de gestión del suelo. Dado el rol de los gobiernos locales en materia de desarrollo urbano, ha sido abordado el tema de fortalecimiento institucional en materia catastral, quedando bien establecida la necesidad de utilizar modelos escalables y adaptables a la diversidad de situaciones o a las distintas capacidades técnicas y financieras encontradas en cada municipio. Por ello, se destacó el rol de los gobiernos nacionales en la promoción de estrategias de capacitación, sostenibilidad y apropiación de la herramienta por parte de los funcionarios políticos y técnicos.
El día 9 se realizo la X Asamblea del CPCI, en la que el Instituto Geográfico y Catastral de Quintana Roo, México, fue ratificado por dos años más frente a la presidencia del Organismo.
Las
presentaciones y grabación del evento se encuentran disponibles en:
http://www.catastrolatino.org/documentos/2024/XV%20Congreso%20Colombia/xv_congreso.html;
Día 1, https://www.youtube.com/watch?v=t8o8Zy2FaNU ; y